· Chujiro Hayashi (médico y oficial de la Marina Imperial Japonesa) recibió el Shinpiden en 1925 (año 14 de Taisho) y abrió una clínica de Reiki en Shinano Machi, Tokio. Después de la muerte de Usui, manteniendo como base el estilo Usui, fundó la "HAYASHI REIKI KENKYUKAI" (Asociación de Reiki de Hayashi). Su mujer le sucedió como segunda presidente.
· Hayashi Reiki Ryoho fue difundido mayormente en Japón y se formaron 13 maestros. De esos 13, 2 eran mujeres y se otorgó el Shinpiden a Hawayo Takata, una mujer Norteamericana de Hawai de origen japonés, que viajó a Japón para recibir tratamientos médicos en 1938.
· Hawayo Takata abrió una clínica de Reiki en Hawai. En los últimos años de su vida, formó a 22 maestros. (Después de la muerte de Takata Sensei, su nieta, Phyllis Furumoto fundó una asociación y sucedió a su abuela. Barbara Ray Weber con otras ideas, fundó otra asociación The Radiance. Además de estas 2 asociaciones, existen más asociaciones pequeñas y medianas, así como maestros independientes).
· Reiki fue reintroducido en Japón a finales de 1980. Ahora, están siendo difundidos varios tipos de Reiki Occidental.
· Reiki Tradicional sigue activo en Japón y en la "Usui Reiki Ryoho Gakkai" fundada por Usui Sensei, se sigue manteniendo la tradición.



El Prana por lo tanto circula a través de estos canales situados por todo nuestro cuerpo astral denominados nadis. Para el recorrido de la Kundalinî nos interesan tres nadis fundamentales. El sushummâ que corresponde al trayecto de la médula espinal en la columna vertebral. Y el idâ y pingalâ que se enroscan entorno al primero como las dos culebras del Caduceo de Mercurio. De modo que tras adoptar una posición especial y detener la mente concentrándose en un punto entre las cejas, y controlando el equilibrio entre los canales de respiración idâ y pingalâ se crea un calor interior que despierta la Kundalinî. Así es dirigida hacia arriba y a medida que sus anillos se despliegan se van abriendo unas "puertas" para permitir el acceso al canal central (sushummâ). En ese momento el resto del cuerpo debe entonces desvitalizarse desviando el prana de los dos canales hacia el sushummâ. Cuando por fin la serpiente se alza se abren todos los chakras y una llama desciende para unirse a la serpiente que se eleva hacia el Sahasrâra chakra hasta ser absorbida por él. En ese momento nuestra conciencia individual se une a la conciencia universal y penetra en un estado de bienaventuranza y liberación final.